Empresarios y Empleos
Fausto Fernández Ponte
28 de mayo de 2006
I
Nada menos que el dirigente formal del ente patronal mexicano, Alberto Núñez Esteva, incurrió el otro día en un mea culpa: El empresariado ha fallado en crear empleos.
Empero, nuestro personaje, el señor Núñez Esteva, quien preside la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), no abundó acerca de las causales de esa falla.
Y esa falla tiene una expresión asaz dramática: el aumento imparable de la emigración de mexicanos desempleados a Estados Unidos: casi tres mil mexicanos emigran cada día.
Y esa emigración se topará con un cuello de botella en la frontera como secuela de la vigilancia militar estadunidense y el muro de 700 kilómetros de longitud que se construye.
Otras secuelas de esa falla son, a nuestro ver, las siguientes:
1) El aumento de la delincuencia tanto organizada como ocasional y de oportunidad.
2) La caída espectacular del consumo de bienes y servicios suntuarios, innecesarios o no básicos.
3) Y la subida de la demanda de la forma de crédito --compra de dinero-- que se representa en las tarjetas, ocasionando un descomunal endeudamiento social.
II
La opinión de don Alberto es un epítome del sentir de no pocos en la élite propietaria, concesionaria o usufructuaria --bajo muchas modalidades-- de los medios de producción.
Hágase la salvedad de que esa élite del llamado sector privado se conforma de banqueros, industriales, comerciantes, especuladores bursátiles y financieros, etcétera.
Y, naturalmente, su registro de la realidad y de los problemas de México --a nuestro ver ciclópeos y complejos-- se determina por la certidumbre y fluidez de sus ingresos.
Consígnese aquí a título ilustrativo el sentir de cierto prominente empresario de la seguridad privada, quien nos decía: "Mientras más inseguridad pública haya, más gano".
Empero, ese empresario se quejaba, precisamente, de que si bien la inseguridad pública se traduce en enormes ganancias para él, "las empresas operan en entornos de incertidumbre".
Ofrecía, puntualmente, lo que sigue: "Pagamos más impuestos, cotizamos cada vez más para prestaciones sociales (IMSS, Infonavit, etcétera) y ello se come las ganancias".
III
Y argüía: "Por esas razones, no puedo aumentar el número de empleados en mis empresas. No puedo crear más empleos. De hecho, estoy quitando empleos. Tengo un mínimo de empleados".
Esta lógica empresarial tan simplista nos lleva al aludido mea culpa del señor Núñez Esteva, el mandamás en la Coparmex, en el sentido de que el sector privado "ha fallado".
El sector privado mexicano "ha fallado" en la creación de empleos porque el desempleo es inherente a la forma de organización económica o modelo económico-- prevaleciente.
Y ese modelo económico --ya lo sabemos-- no es resultado de nuestra propia experiencia histórica, sino que fue implantado draconianamente en México desde el exterior.
Esa implantación se inició durante el gobierno presidido por Miguel de la Madrid y se desarrolló salvajemente en los sexenios posteriores. Privilegió el lucro brutal y el saqueo.
Y desprivilegió el bienestar social, pues la lógica del lucro y el saqueo tienen por premisas la reducción de los empleos y su trueque por trabajos de baja calidad.
Ello tiene por consecuencia la precariedad del empleo, con sus manifestacionse execrables: el desempleo, la inseguridad laboral, la emigración y la delincuencia.
Elógiese, sin embargo, el rapto de sinceridad del señor de la Coparmex.
ffernandezp@prodigy.net.mx
Glosario:
Argüir: sacar en claro, deducir como consecuencia natural, dejar ver con claridad.
Epítome: resumen o compendio de una obra extensa.
Execrable: digno de execración. Condenar y maldecir con autorización sacerdotal. Aborrecer.